Aquí no se habla del Mío Cid, sino de "los Cid míos".

Aquí no se habla del Mío Cid, sino de "los Cid míos".
Los protagonistas de estas historias: Ramonín, Elaine y Camila (mi familia). IMPORTANTE: Ninguno fuma, y nunca lo hago cerca de ellos.

martes, 26 de junio de 2007

Temporada de cata. Día 3

DIA DE CATA 3. CONTINUAN LAS HOSTILIDADES. CONFLICTOS INTERNOS: ALTO MANDO HECHO PRISIONERO. ESCARAMUZA NAVAL.

Ayer fue día de limpieza general en casa (agua por todas partes, detergente, baldes para “trapear”, muebles patas arriba y alfombras encima de las camas, etc). Normalmente, coopero de buen agrado en estas actividades de higiene hogareña, pero esta vez, fui reprendido y castigado a ser observador pasivo, relegado al único lugar seco en el apartamento: el balcón-patio trasero. Resulta que fui sorprendido in-fraganti por mi esposa en el acto de utilizar (a escondidas) su laca de uñas para reparar una boquilla de madera de una de mis pipas criollas. Esto no iría más lejos si no fuera por la agravante de que ella venía en ese preciso momento a reclamarme por usar (también clandestinamente) el aceite de bebés de Camila para abrillantar las pipas, de lo cual, encontró evidencias sobradas para incriminarme.

Al ser transferido a Alcatraz (la similitud era inmensa, pues estaba en una especie de peñón seco, rodeado por un mar de agua, donde la profundidad alcanzaba los 2 mm en las zonas más bajas) y limitado espacialmente (por la máquina lavadora, montañas de pañales usados, ropa por lavar, etc), me encuentro con la poca agradable sorpresa de que Ramonín también estaba guardando prisión en el mismo lugar (normalmente pasa los episodios de limpieza hogareña cómodamente encima de su cama, viendo la tele) que yo, pero por un delito diferente. Ramonín está habituado a estas condenas y a esta penitenciaría, pues su prontuario criminal hogareño es bastante amplio (debo decir con toda honestidad y orgullo que mi hijo nunca ha sido reincidente, él siempre logra rebajas en sus sanciones porque comete siempre un delito nuevo y diferente). Esta vez, logró (es un genio) una reproducción casi exacta a crayola de las pinturas rupestres de Atapuerca, pero en la pared de la sala. Antes, yo estimulaba las explosiones creadoras de Ramonín, pero luego, la práctica de tener yo que re-pintar las paredes, hizo que mi entusiasmo por este arte decayera bastante.

En fin, henos aquí, con la maldita circunstancia del agua por todas partes (parafraseando la obra teatral), con mi pipa cubana (no tuve tiempo de recoger mis enseres profesionales de cata), nada de tabaco, ni fósforos. Estos elementos se encontraban a una distancia de 5 yardas náuticas de la costa (nuestra posición de cautiverio), pero el tramo naval estaba custodiado por un buque guardacostas (un destroyer bautizado como “Elaine”, botado al mar hace 30 años, con alto poder de fuego, sensores de movimiento en la superficie y portador de ojivas nucleares), que se desplazaba periódicamente frente a nosotros (limpiando) a unos 2 nudos, hacia delante y hacia atrás (Esto –Oeste y viceversa).

Por otra parte, el ala izquierda de mi ejército (Camila) estaba a más de 10 yardas náuticas de nuestra posición, incomunicada y en tierra firme, en un lugar seco y cálido (la cuna). Nada que hacer.

Cuanto todo parecía perdido, Camila llama por algo (solo las madres saben a ciencia cierta qué quiere una criatura de 4 meses que chilla desaforadamente: gu-gu-gu gua—blu-blu-guaaaa), el destroyer cambia su curso hacia el Sur-Suroeste, y aprovecho a sobornar a Ramonín con el último caramelo de menta que tenía en los bolsillos, a fin de que recuperara para mí los útiles de cata, en una operación anfibia comando-kamikaze.

Ramonín se lanza a la aventura subacuática debidamente equipado (solo andaba en calzoncillos) con el caramelo en la boca, y con el valor infundido por la promesa de que a su regreso victorioso yo le recompensaría con unas galletitas dulces adicionales. Logra atrapar la bolsa de tabaco (W.O . Larsen), y los fósforos. En eso, regresa el guardacostas, y Ramonín es alcanzado por una ráfaga. A sangre y fuego, logra alcanzar la costa de nuevo, dejando atrás en la estampida la Claude Romain.

A continuación, (y para garantizar a cubierto el desembarco de mi pequeño mercenario de regreso) hubo un intercambio de disparos con el guardacostas desde nuestra posición, pero al fin nos dejaron en paz. Ramonín se retira al lado de la máquina lavadora a lamerse las heridas y reclamarme descaradamente por el resto de su recompensa.


Día 3. Bitácora del Capitán

Rancho de la prisión: W.O. Larsen
Escudilla del preso: Pipa criolla, cubana
Hora: 19:00 hora local
Compañero de celda: Ramonín
Edad de la población penal: 4 años


Comenzamos abriendo el paquete, con los mismos resultados que los anteriores. Agradable y penetrante olor a ciruelas, muy dulce, que hace recordar a mi agente 007 la promesa de las galletitas. Como no puedo satisfacerlo de inmediato, y aumentan sus reclamos, accedo (mediante dura negociación) a regalarle el paquetito de Larsen vacío, el cual acto seguido es convertido por mi hijo en una complicada y surrealista armadura para su Power Ranger de juguete.

La fumada es agradable, suave y aromática. Me pasa lo mismo que en las catas anteriores, y los mismos síntomas. Ahora, el agua la tomo del grifo. Sigo fumando en silencio, pues mi compañero de prisión y yo nos dedicamos a ensimismarnos, pensando cada cual en su condena, y rumiando nuestros pecados cometidos.

A los 40 minutos de fumada, la casa está seca y limpia. Se declara una amnistía, y todo progresivamente vuelve a la normalidad.

Resultados:

Tabaco Light, muy agradable y aromático, pero no me gusta mucho.

SCORE: LATAKIA 1: W.0. Larsen: 0


El Latakia ha salido invicto ¡¡¡¡¡


Bueno, a partir de este momento, he “quemado mis naves”, las tropas regulares fueron diezmadas, así que paso a la lucha de guerrillas original, jajajajajajaj

lunes, 25 de junio de 2007

Temporada de cata. Día 2


DIA DE CATA 2. CONTINUAN LAS HOSTILIDADES. GRAN CANTIDAD DE BAJAS.

Queridos amigos

Hoy les sigo reportando sobre mi “coto de cata”. Esta vez, me tocó probar el tabaco en los bajos de mi edificio, acabado de llegar del trabajo, pues era mi día de “pastoreo infantil supervisado”, es decir, bajar a Ramonín (vivimos en un apartamento en Alamar, Ciudad de La Habana, en un 5to piso) a que juegue con sus amiguitos del edificio se revuelque y retoce en el fango y demás…..

Día 2. Bitácora del Capitán

Lugar del sacrificio: Espacio abierto, frente al edificio.
Hora: 18:30 hora local
Arma utilizada: Pipa Claude Romain (qué belleza)
Víctima propiciatoria: Borkum Riff (3 gms)
Feligreses asistentes: Ramonín y 4 compinches más, compañeros de juegos.
Edad promedio de los acólitos: 4 años

Comienzo abriendo el paquete ante una multitud enardecida y murmulleante por la curiosidad, y muy poco disciplinada para mi gusto. Juguetes, carriolas, velocípedos y palas/baldes para jugar y joder con fango quedan abandonadas momentáneamente a unos pocos metros del lugar escogido por mí para el ritual.

El tabaco huele espectacularmente bien, algo como a uvas pasas sale del paquetito. Breve revuelo entre los espectadores. Frases inconexas y algún que otro empujón para ver y oler mejor. Me cuesta Dios y ayuda convencer teóricamente a los sabichosos que esto es tabaco, y no dulce para comer. La teoría no funciona, hasta que uno de ellos, el más grande, unos 5 años, prueba a masticar una hebra. Resuelto el problema.

La pipa prende bien, a las mil maravillas, se siente un poco más fuertecito que el Mac Baren, pero igual de Light y aromático. En medio de la fuma, y bajo protesta, tengo que subir a mi hijo a buscar un pequeño camión de juguete, así que agarro la pipa entre los dientes y subo. Al bajar, se han acumulado algunos jugos extra en la pipa, pero extrañamente, tienen un sabor dulzón, y agradable.

A los 30 minutos de fumada, y luego de separar un par de veces a los más revoltosos (a estas alturas ya ninguna de mis ovejas – heredero incluído-me prestaba mucha atención, y se enfocaron a untarse de fango concienzudamente y gritar como unos posesos los unos a los otros) del grupo de asistentes, empezaron los mareos de rigor (SIEMPRE ME PASA CON TABACO RUBIO) aunque más ligeros que con el Mac Baren.

Tomé agua, y lo mismo, me picaba la lengua fenomenalmente.

A los 45 minutos de fumada, se levanta el campamento por órdenes expresas del mando Superior (mi esposa ya tenía el baño preparado para Ramonín). Hacemos un conteo de las bajas, recuperamos los medios de guerra enterrados en la tierra, y envío a cada uno de los supervivientes a sus cuarteles respectivos.

Termino la fumada en las escaleras, lidiando a brazo partido con un Ramonín histérico que se retuerce y da batalla a más no poder para evitar el abandono obligatorio del teatro de operaciones militares. Nada como el sentido de este chiquillo sobre lo que considera el sagrado cumplimiento del deber.

En fin, llego a casa un poco cabreado, molido, mareado y salivando más que el perro de Pavlov.


Resultados. B-Rifff, un poco mejor que el Mac Baren, pero suave igual.

SCORE: LAtakia 1, B.Riff: 0

Seguiremos informando, hoy me toca otro.

sábado, 23 de junio de 2007

Temporada de cata. Dia 1

Temporada de cata. DIARIO DE CAMPAÑA . COMIENZAN LAS HOSTILIDADES

Queridos amigos

A partir de hoy (y hasta que se me acaben las muestras), les iré enviando el producto de mis primeras "catas". Les recuerdo que ayer en la oficina (no mepude contener) empecé con el Latakia. Bueno, pues ahí les va:

Llegué por la noche a la casa, con mis nuevas pipas y tabaco al hombro, fue tanto el alboroto que armé en casa, (al mostrar las 2 bellezas) que mi esposa accedió a dejarme fumar solo para la cata en mi butaca favorita de la sala, frente a la tele (GRACIAS IVAAAAANNNNN y el Pipa Club de Asturias), jajaja.

Para la ocasión, tuve que esperar impacientemente a que todo estuviera en calma en la casa, y luego de dar una pequeña conferencia teórico práctica a mis familiares, todo empezó de la siguiente manera:

Día 1. Bitácora del Capitán

Tabaco escogido: Mac Baren Uncle Lewis Whisky (3 gms)
Pipa: AMPHORA 302
Hora: 21.30 hora local
Público asistente al acto: 3 personas (esposa y dos nenes)
Edad del público: 30 años (Elaine), 3 años (Ramonín) 4 meses (Camila)
Bebida acompañante: whisky sobrante de los despojos de guerra del Día de los Padres

Se abre la sesión, con toda la tribu mirando expectante como preparo la pipa (en realidad, solo Elaine y Ramonín cuentan, porque Camila tiene solo 4 meses de edad, así que su mirada siempre es "expectante"). Silencio sepulcral....... Bien, el aroma del tabaco (aún sin encender) es magnífico, muy agradable al prójimo (entiéndase "prójimo" por persona no fumadora tolerante eg. mi mujer).

Comienzo la carga de la pipa muy solemnemente, aunque se forma un pequeño forcejeo inicial con Ramonín por lanzarse a tomar el paquetito de tabacovacío para inflarlo como un globo. Es reducido a la obediencia por la intervención fulminante de su progenitora, y el experimento continua sin mayores sobresaltos. A estas alturas del juego, ya había prendido la pipa exitosamente.

El humo es agradable en las 2 primeras pitadas. El sabor es dulzón, y casi "no sabe a nada". Lamentablemente, es tabaco rubio, es decir, "suave", me sabe a (perdonando la comparación)Marlboro , y eso para un ex-fumador decigarrillos fuertes (tabaco negro) como yo, es mortal. No obstante, el prójimo (mi esposa) prueba una pitada, y emite un criterio positivo al respecto. Este hecho insólito refuerza mi pensamiento de que no me va a gustar este tabaco.

Gradualmente, el entusiasmo del público comienza a decaer, Camila es llevada en brazos a la cuna, y Ramonín cabecea en la butaca de enfrente, pidiendo ver una vez más a los Power Rangers en video. Yo sigo echando humo, pero ya a estas alturas del partido el tabaco me empieza a picar en la lengua, y a sentir ligeros mareos.

Tomo agua y me aumenta el picor en la lengua (no vale conmigo eso de aprender a fumar, pues hago lo mismo con tabaco fuerte y no me pasa esto). En realidad, obtengo una ligera borrachera, tal y como me pasaba cuando probaba cigarrillos "Light", luego de 50 minutos de fumada sin escalas.

Final, que tuve que seguir el principio homeopático de "lo que lo produce, lo cura", y cargar otra pipa con mi tabaco fuerte normal, para quitarme el malestar. Eso fue en un intervalo de 90 minutos.

Resultados:No me gusta el tabaco rubio, aromatizado o no.

SCORE:Latakia: 1, Mac Baren: 0